- Vacazul (2008) La Sala. Madrid

Lugar: La Sala Live!
Fecha: 9 febrero 2008
Asistencia: 200 personas
Artistas Invitados: Callaghan
Precio: 10 – 12 euros
Músicos: Jairo Zavala (vocalista y guitarrista), Javier Vacas (bajista), Daniel de Madariaga ‘Txarras’ (teclista) y Javier (baterista)

Setlist: Mucho mejor, Vete, Perdona, Dentro, Burbujas, Cascarow, Vienen tiempos, Ojalá, Vértigo, Levitar, E.I., (Intro de It’s a long way to the top if you wanna rock n roll, de AC/DC) Aburrido, Lleno de besos, Metrópolis, Tus amigos
Bis: Chico listo, Te quiero, Vuelo, Cómodo

Una tonta y mala noche de borrachera Jimmy Page y Robert Plant se lo montaron. Sí, sí. ¿Cómo, que no lo sabías? Pasados de anfetas y con una nevera repleta de botellines de Mahou, lo que era un post concierto normal se les fue de las manos y terminaron compartiendo cositas íntimas. Se comenta que por allí también andaba Ray Manzarek, teclista de los Doors, aunque este extremo no está confirmado. El caso es que aquella bizarra noche en un sórdido (aunque de cinco estrellas) hotel, por accidente, engendraron a (La) Vacazul. De aquellos polvos estos lodos.

Guitarréame, rásgame, aráñame, pínchame, dame una birra, dame un bis, dame un acorde lleno de bilis. Rocanrol, guitarra potente, bajo de fantasía, teclado hammond envolvente, batería machacona. Publico cantarín, bailón, respondón, simpático. Muchas chicas, algunos chicos menos. Casi dos horas, demasiado calor. ¿Dónde quedó Radio Tangente? Por cierto, como artistas invitados estuvieron Callaghan, también muy rockeros, con un guitarrista muy a lo Richie Sambora tanto en la pinta como en el arte (muy bueno el tío). Fueron todo un buen presagio de lo que vendría después.

Llevaba mucho tiempo detrás de este grupo. Uno de los últimos discos originales que compré fue Vienen tiempos (2004). Desde entonces, varias veces estuve cerca de poder conocerles en directo, pero al final ha resultado ser una tarea más complicada de lo que pudiera parecer a priori. Casi han tenido que ser ellos, acercándose a La Sala, a diez minutos andando de mi casa, los que han propiciado el encuentro. Los dos hemos puesto de nuestra parte y la primera cita fue satisfactoria. Y eso a pesar de que Javi el baterista llevara una camiseta en la que podía leerse ‘Coda’, seguramente en referencia al peor disco de Led Zeppelin. Pero al final se lo perdoné porque soy súper majo.

En los conciertos en salas pequeñas puedes fijarte en detalles distintos a otro tipo de eventos. Puedes fijarte, por ejemplo, en las sonrisas de los músicos, las que se dedican entre ellos y las que reparten con el público, o en cómo Jairo aprieta los dientes mientras rasga las cuerdas de su guitarra en alguno de esos intensos pasajes instrumentales de purito rock tan característicos. Incluso te da tiempo a preguntarte en qué pensarán los camareros de las barras, acostumbrados a ver desfilar por su local a todo tipo de grupos de lo más variopinto.

A pesar de no haber obtenido todavía el reconocimiento que merecen, Vacazul mantienen una curiosa relación con sus seguidores, entregados con fe ciega a la causa, incansables en la empatía. A ellos la banda les regaló varios temas nuevos, entre los que destacó Vértigo, todo un pelotazo en la clásica línea del grupo. Por el lado negativo destacó Lleno de besos, tengo que decirlo, se siente, una canción ñoñita, blandita, que al menos de primeras… es un rollo.

Camisetas a diez euros, disquitos a doce, algún dvd a veinte. Actuaciones como esta son de las que animan a pasar por caja un poquito más. De hecho, supuestamente iba acreditado como prensa, pero mira tu, que no estaba en la lista. Casi que me alegré, porque reconozco que me sentía un poco mal por no darles unos euros a estos convecinos. Superada la cara de tonto que se te queda por el traspapeleo, lo cierto es que me alegro de haber apoyado un poquito a Vacazul, una de las bandas españolas que más merecen y que menos tienen.

La Sala Live! esta es un antrazo-discoteca de lo peorcito de Carabanchel, donde encima te clavan garrafón del chungo sin ponerse colorados, pero el caso es que últimamente les ha dado por programar conciertos interesantes a buen precio. Este es el cartel colocado a las puertas del local para anunciar el concierto: