Toundra (2013) Joy Eslava. Madrid

Sin categoría

El asesinato del estribillo pop

Lugar: Sala Joy Eslava. Madrid
Fecha: 23 febrero 2013
Asistencia: 1000 personas
Artistas Invitados: The Hardtops
Precio:
Músicos: Víctor, Esteban, Alberto y Álex
Setlist Ara Caeli, Cielo Negro, Bajamar, Marte, Lilim, Requiem, I Belive in Miracles (versión de los Ramones), Medusa, Magreb, Zanzíbar, Espírita, Bizancio

Proeza. Así es como se resume lo que hicieron Toundra este sábado en una abarrotada Joy Eslava, en pleno centro de Madrid, con un millar de apretadas personitas desperdigadas por las tres plantas del local.

Hazaña. Así hay que calificar que una banda sea capaz de agotar todas las entradas en una sala como esta sin un maldito estribillo, sin una estrofa que tararear. Únicamente rock instrumental progresivo, prácticamente metal, con una pegada potente y certera. Instrumentos que hablan sin decir una sola palabra.

Hombrada. Así debemos hacer balance de una velada hipnótica, onírica, todo un viaje astral de repetitivos movimientos de cuello, balanceantes, dirigido por cuatro músicos titulares (con ayuda de algunos fichajes) de una creatividad arrolladora. La densidad del rock subyugante que te abraza suavemente y vampiriza tu voluntad.

Valentía. Así hay que reconocérselo a una banda cuyo concierto es básicamente un desarrollo instrumental de Black Sabbath constante. Todo es como un mitológico encuentro entre Roger Waters, King Crimson, Frank Zappa, Tony Iommi y David Gilmour.

Heroicidad, empresa, aventura. Porque cuantas más vueltas le doy más alucinante me parece esta banda vaya por todo el país llenando salas de tamaño medio haciendo lo que le da la gana y sin concesión alguna a las pautas más elementales del negocio del entretenimiento.


Ambición. Porque en varios temas, como en la apertura con ‘Ara Caeli’, contaron incluso con una sección de cuerda sobre el escenario, demostrando que en el escenario de la Joy caben más músicos de lo que cabría imaginar inicialmente. Una docena concretamente.

Gesta. Porque salen a tocar, lo dan todo, machacan sus instrumentos y someten al respetable a sus propias leyes, basadas en un aparentemente interminable talento musical, destilando honestidad, sinceridad y pasión a vida o muerte.

En honor a la verdad hay que matizar que sí hubo en esta ocasión una concesión a la galería, aunque en realidad se trató de un regalo para ellos mismos: la versión del ‘I believe in miracles’ de los Ramones, único tema de la noche con cantante, Escri de los teloneros The Hardtops.

Unos artistas invitados que bien merecen nuestra mención, pues con su mezcla de Green Day, The Hives, NOFX y Chuck Berry dibujaron no pocas sonrisas entre el expectante público, a pesar de tener más bien poco que ver con la música de Toundra. Aunque conexiones debe haber, como quedó claro con la colaboración del guitarrista principal de la velada, Esteban, para tocar con ellos el ‘High voltage’ de AC/DC, siempre incendiario.

Fue, en definitiva, una gran noche para Toundra, una gran noche para su sello Aloud Music, una gran noche para la música, gran triunfadora por encima de cualquier otra consideración. Y es que por increíble que parezca, Toundra son la gran esperanza blanca del rock español, más que nada porque nadie les ha regalado nada y todo lo que tienen se lo han ganado con talento y trabajo. Así tendría que ser siempre. Genuflexión requerida.

Comparte
Tagged

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *