Sr. Chinarro llega este miércoles 16 de enero al Teatro Barceló de Madrid -dentro del ciclo Inverfest– por un doble motivo: Presentar las canciones de su más reciente disco de estudio, Asunción (Mushroom Pillow, 2018) y recordar esas otras que forman parte de Colección permanente (Mushroom Pillow, 2018), el recopilatorio aún más reciente con el que celebra sus 25 años en la música.
«Un cuarto de siglo. Suena mejor que la mitad del cuarto, por ejemplo. La mitad del cuarto suena a chopped pork», plantea a Mercadeo Pop el músico, cuyo nombre real es Antonio Luque (Sevilla, 1970). Prolífico como pocos, echa ahora la vista atrás a su extensa producción asegurando que «se puede hacer una canción al día, lo difícil es hacerla buena».
– Acabas de lanzar el primer recopilatorio tras 25 años de carrera. ¿Por qué ahora precisamente?
Un cuarto de siglo. Suena mejor que la mitad del cuarto, por ejemplo. La mitad del cuarto suena a chopped pork. Es como los aniversarios de boda. La Wikipedia dice que es habitual que los aniversarios se celebren en privado, excepto en los aniversarios n.º 25, 50 y 75, en que se realiza una fiesta con invitados. Estás invitado. A ver si llegamos a los 50.
– 16 discos en 25 años son un montón, ¿no te parece? Prolífico eres… y además no has parado de girar nunca.
Se puede hacer una canción al día. Lo difícil es hacerla buena. Hay que intentarlo. Hay que mojarse. Las hay que llegan a millones de personas. Son las Moby Dick de los que escribimos canciones. Hay que coger el arpón tanto como puedas.
– ¿Y cómo has escogido el repertorio? ¿Te has fijado en las canciones con más escuchas en Spotify? (se dijo recientemente que Metallica escogía algunas canciones para tocar en cada ciudad en función de este parámetro).
Sí que me fijo, pero las de Enhorabuena a los cuatro no las toco, porque son del disco 13 del año 13. Aparte, no se debe hacer lo que el público quiera. El otro día vi una peli muy mala sobre una chica que hacía porno chats para ganar pasta. Si te pones hacer todo lo que el público pida puedes acabar mal, y finalmente cualquiera podrá hacer eso mismo: un estándar, un holograma incluso. ¿Cómo se llamaba la peli? La actriz es clavada a Madonna.
– ¿Estás haciendo balance con este recopilatorio y tras lanzar la pasada primavera Asunción?
No, yo empiezo de cero cada día. No me creo nada. Cuando hago conciertos sí hago balance, pero solo sobre el setlist. Si está bien el orden, si falta alguna, si sobra otra. Cosas de músicos.
– Ahora que recopilas, ¿cómo de satisfecho estás con tu propia obra?
Tienen que pasar muchos años para que vuelva a ponerme un disco mío y escucharlo con objetividad. Pero el principal pensamiento que me viene entonces a la mente es que el tiempo pasa demasiado deprisa.
– ¿De qué estás más satisfecho? ¿Y menos?
De no haber tenido que estar décadas encerrado en una fábrica. De no haber ahorrado para el chalet (aún). Es que no es igual componer con auriculares que con el amplificador fuertecito.
– Echando la vista atrás, ¿dirías que El fuego amigo fue un punto de inflexión para ti?
Sí, claramente. Dejar Acuarela y aprender por fin a ser un profesional. Hacer canciones con estrofa y estribillo, procurar que las metáforas se entendieran algo más. Tener una discográfica con posibles, un management (aunque esto pasó un poco después de El fuego amigo y antes que El mundo según).
– Y ha cambiado mucho la escena musical independiente española desde que tu empezaste. ¿Dirías que ahora es mejor o solo diferente?
Sigue habiendo grupos bastante amateur. Prefiero a los profesionales, incluso aunque sus canciones me resultasen menos interesantes, y tampoco es el caso. Hay que dignificar la profesión. Me parece envidiable, en el buen sentido, lo que han logrado varios grupos de las nuevas generaciones, o casi de la mía, como el caso de Love of Lesbian. O lo pegadizas que son las de Lori Meyers. Discos de debut como el de Viva Suecia, por ejemplo… están a mucha distancia de los de los noventa. Dan trabajo a mucha gente también. Sin duda es mejor así.
– ¿Te sientes justamente reconocido por tu contribución como pionero a ese indie que ahora parece estar tan de moda?
No he esperado jamás una paga de nadie. Y menos una medalla. Una vez cobré el paro, es verdad, pero espero que no vuelva a ocurrir. Ni a jubilarme aspiro.
– ¿Tú te has sentido alguna vez de moda?
Cuando El fuego amigo y El mundo según iba más gente a los conciertos. No creo que fuera por moda, más bien es que fueron dos muy buenos discos seguidos. Consuela a veces pensar que la gente es tonta, pero no lo es tanto, al menos no toda. Hay modas incomprensibles, como la del reguetón o la de los pantalones de campana, porque el aburrimiento es muy malo. Pero lo bueno es bueno siempre. Solo hay que renovarlo, actualizarlo. En al arte no existe la obsolescencia programada.
– ¿Músico de culto o nombre clásico? ¿Cómo te ves tú?
Un humilde hacedor de canciones a su manera.
– ¿Sabes si te presta atención la nueva generación de chavales?
Por lo que veo están todos con el trap, tienen a chicos malos como modelo. Ya se les pasará. Yo prefería a los Sex Pistols. Lo que me da risa es que le guste el trap a gente de cierta edad. En fin, ya volverá a estar de moda el sentido del ridículo. Todo llega y todo pasa.
– Lo que sí que parece en líneas generales es que el público quiere consumir y cantar mucha música en castellano, ¿no te parece? ¿Estamos en el mejor momento del pop-rock español desde la tan mitificada movida? Aunque también es verdad que todo empieza a sonar demasiado igual, tiene pinta de acercarse el rubicón…
El inglés está fuera del alcance del español medio y el karaoke tiene una enorme promoción, hay muchos programas de televisión que se dedican a eso con furia, al noble arte del karaoke. Cuando ves a la gente cantando tus canciones en tu concierto sabes que lo has conseguido, que la canción ha llegado, que no están ahí por estar. En cuanto a la producción festivalera de los discos… Bueno, esto es España. La furia española, la caña de España… Manolo el del bombo a negras… Eso nunca cambiará.
– Es que yo tengo la sensación en ocasiones de que hay grupos que parecen estar más preocupados de estar en los festivales que de cualquier otra cosa. ¿Acabarán los festivales matando la creatividad de la escena?
No la matarán mientras mantengan las carpas pequeñas de 17:00 a 21:00. Lo interesante siempre ha sonado ahí. Y les sale barato. No van a renunciar al chocolate del loro. Vaya, sería una torpeza enorme. En los escenarios grandes a la hora del botellón ya pueden ir mirando boletines de moda. Para mí siempre fue la hora de la barra libre.
– Por cierto, ¿sabes qué es el indie?
La segunda división. La cantera.
– ¿Y hay futuro para la música independiente española?
Claro, mientras haya una primera división. Y la hay, ya la han visto muchos.
– ¿Y hay futuro para la música en general? ¿Escuchas algo ahí fuera que te haga tilín hoy en día sin tener que mirar al pasado?
Claro, más que nunca. Es impresionante la cantidad de buenas bandas que hay por el mundo. Ya ni miro el nombre de las bandas, me agobio. Añado las canciones a listas y cuando me suenan de varias veces ya memorizo el nombre. Por si los traen a tocar a las carpas de las cinco.
– Ya para terminar y ya que recopilas. ¿Qué es el éxito para Sr Chinarro en enero de 2019?
Lo más importante es tener salud, ya se sabe.
