– Mago de Oz (2001) Sala La Riviera. Madrid

Crónicas

Lugar: Sala La Riviera. Madrid
Fecha: 27 enero 2001
Asistencia: 2.000 personas (sold out)
Artistas Invitados: Skyclad
Precio: 1.800 / 2.000 pesetas
Músicos: José Andrea (voz), Txus di Fellatio (batería y coros), Carlos Prieto ‘Mohamed’ (violín y coros), J. C. Marín ‘Carlitos’ (guitarras), Frank (guitarras), Salva (bajista), Fernando Ponce de León (flautas, whistle, pito castellano, instrumentos varios), Sergio Cisneros ‘Kiskilla’ (teclados, piano, sintetizadores)

Setlist: Intro, Satania, Maritormes, El Santo Grial, Hasta que el cuerpo aguante, El que quiera entender que entienda, El lago, El cantar de la luna oscura, Es hora de marchar, Medley (Te esnucaré contra’l bidé, La leyenda de La Mancha, Bálsamo de fierabrás, Polla dura no cree en Dios, Judas, La canción de Pedro), Santa compaña, Gerdundula, Requiem, Finisterra, Hasta que tu muerte nos separe, Astaroth, La danza del fuego, Fiesta pagana, Molinos de viento

(FOTOS: revista Heavy Rock)

Paco Fernández, de la revista KERRANG!, nos sirve de cronista en esta ocasión:

MADRID FUE UNA FIESTA… ¡¡PAGANA!!

La carta de presentación de Mago de Oz de cara a este concierto no podía ser más prometedora; su último trabajo ha sido disco de oro, había reventado Barcelona el fín de semana anterior, han sido confirmados como el primero grupo español que asistirá al prestigioso Wacken Open Air ,tres días en La Riviera madrileña… todo parecía indicar que estábamos a punto de presenciar uno de esos acontecimientos que no puedes perderte.

La noche de aquel sábado 27, como también ocurriera el día anterior, los tickets se habían agotado desde hacía ya unos cuantos días, de hecho, a medida que uno se aproximaba a la sala era normal encontrarse con gente que estaba a la «busca y captura» del preciado accesit. En un principio se había anunciado que los Mago contarían con la presencia del grupo invitado Skyclad, todo un grupo de culto cuya visita a nuestro país se había demorado en demasía estos últimos años; pero la ley de Murphy es implacable, y ocurrió lo que nadie se esperaba, que el líder del la banda, Martin Walkyer, ha decidido abandonar el barco, toda una decepción.
El concierto empezó a eso de las nueve de la noche: la sala se oscurece, la impaciencia crece, es entonces cuando comienza a sonar el prólogo de su ya popular «Finisterra», seguido de un «Satania» que les sirve para, desde el principio, dejar muy claras cuáles serán las claves del concierto: fuerza, buen rollo, una puesta en escena muy trabajada y muchas ganas de pasarlo bien.

A partir de ahí la primera parte del concierto se convierte en un ejercicio de auténtica intensidad, «El Santo Grial», «Hasta que el cuerpo aguante», con participación de Pacho de Ankhara incluida… se nota que la gente está disfrutando, pero se nota también que son los temas nuevos los que recogen del auditorio el número más grande de aplausos, pero eso también es comprensible tendiendo en cuanta que la situación de los Mago de Oz ha cambiado desde aquel genial «Jesús de Chamberí».

Aún con todo se nota de manera muy clara que temas como «El Lago», «El bálsamo de Fierabrás» o «Gerdundula» siguen siendo cortes que ganan en directo muchísimo. A medida que avanzaba la actuación la fiesta iba creciendo y el grupo se iba desenvolviendo de manera magistral, con el único defecto de pequeños problemillas de sonido que en ningún momento mermaron la capacidad del grupo.

Se puede decir que el concierto mantuvo en todo momento un balance muy trabajado entre lo que es el espíritu natural de fiesta de la banda y el lado más tranquilo y relajado: de lo primero cabe destacar «Polla Dura no cree en Dios», que contó con el inestimable a»POLLO» escénico de Super Polla, «El que quiera entender que entienda», «La Leyenda de La Mancha», «Judas», «La Canción de Pedro», y la enorme «Tesnucaré contra´l bidé» aunque fue una pena que esta última quedará incluida dentro de un medley en lugar de tocarla entera.

En cuanto al lado más serio y tranqui, «Es hora de amrchar», «El Cantar de la Luna Oscura» fueron del o mejorcito. Mención especial merecen dos temas que quedaron geniales, «Finisterra» con la presencia de nuevo de miembros de Ankhara, que no suele ser habitual, y sobre todo «Réquiem», que para mi fue el momento álgido del concierto.

Todo estaba saliendo a pedir de boca, los nuevos miembros del grupo han encajado muy bien y ha sabido realzar la presencia sonora en directo, la gente disfrutaba y el grupo también, de hecho tuvieron algún desliz, pero la intención de los Mago nunca ha sido ser unos perfeccionistas sino la de disfrutar y hacer disfrutar, y eso lo estaban consiguiendo.

Como colofón de una fiesta y un hito que recordaran los fans de la banda durante mucho tiempo, dos temas que hicieron que la temperatura de la sala y la euforia de la gente se disparara, «La Fiesta Pagana» y «Molinos de Viento»… genial. Al final, se respiraba entre los asistentes un ambiente de satisfacción absolutamente generalizado y es que no había sido para menos: es posible que se echara de menos algún tema como «Hasta que tu muerte nos separe», pero aun con eso el repertorio había estado bastante bien. Solo espero que no tardemos mucho en volver a ver una actuación como la de aquella noche… Wacken aguarda.

Poco más que añadir a una crónica tan detallada, exhaustiva y entregada a la causa como esta. Si acaso, recordar el gustazo que supone dar con un grupo que está luchando por abrirse camino desde bien abajo, y acompañarle en su crecimiento. Porque yo me compré original el disco Jesús de Chamberí (1996) y me encantó. La Leyenda de La Mancha (1998) me lo grabaron en casette -cuando los colegas te podían grabar música sin tener que pagar el canon digital y sin sentirse delincuentes- y me gustó más aún. En ese momento comenzó mi época de apoyo decidido a los Mago, a pesar de las críticas, a pesar de los pesares.

Por eso, después de haberles visto ya en el Viña Rock del 99 y en Zaragoza ese mismo año, cuando se anunció que tocarían tres noches seguidas en La Riviera (3.000 personas por noche, 9.000 en total, todo un pabellón de deportes), me alegré de su éxito y me sumé sin condiciones a la fiesta. No faltaron amigos con los que disfrutar de la clásica y a veces mítica noche de sábado de concierto.

Apreturas, calor, sudor, calimocho de la época, cerveza no del todo fría, penurias de bebercio a las puertas de la sala, primeras filas, segundas filas, algún respiro y mucho salto. Lo mejor del concierto, los temas de Jesús de Chamberí y La leyenda de La Mancha, mis dos trabajos preferidos de la banda madrileña, que esta noche, por cierto, desplegó un montaje visual bastante currado y con todo tipo de referencias y homenajes a gurús del heavy como Iron Maiden. Los temas de Finisterra (2000) me dieron bastante igual, algunos me sonaron demasiado obvios y un poco ridículos (supongo que este fue el fin de mi relación sincera con el grupo).
Estuvieron, como siempre, divertidísimos y entregados. José Andrea demostró una vez más su talento y sus dotes como vocalista del género -heavy, se entiende-, mientras que el resto de músicos se dedicaron a lo suyo, que no era otra cosa que provocar el desparrame generalizado. Como siempre sucede tras un concierto de larga duración, como fue este, con más de dos horas y media, al final uno ya está deseando que acabe para poder tomarse un respiro. Pero claro, eso queda mal reconocerlo. Yo, al menos por aquella noche, tuve más que suficiente de Mago de Oz.

Esto se contó en Los+Mejores Rock Magazine:


Crónicas:
Kerrang!
Rock Hard

Otros conciertos de Mago de Oz en Mercadeo Pop:
Viña Rock (1999) Auditorio de Villarrobledo (Albacete)
Fiestas del Pilar (1999) Rincón de Goya (Zaragoza)

Webs recomendadas:
http://www.magodeoz.com/
http://es.wikipedia.org/Mägo_de_Oz

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