Deep Purple (2009) Palacio Vistalegre. Madrid

Sin categoría

Lugar: Palacio Vistalegre. Madrid
Fecha: 15 septiembre 2009
Asistencia: 3.000 personas
Precio: 40 euros
Artistas Invitados:
Músicos: Ian Gillan (voz y pandereta), Steve Morse (guitarras), Roger Glover (bajista), Don Airey (teclista), Ian Paice (baterista)

Setlist: Highway Star, Things I Never Said, Strange Kind Of Woman, Rapture Of The Deep, Fireball, Contact Lost/Well Dressed Guitar (el solo de Morse), Sometimes I Feel Like Screamin’, Wring That Neck, The Battle Rages On, Don Airey Solo, Perfect Strangers, Space Truckin’, Smoke On The Water
Bis: Hush, Black Night




Repentinamente recupero la consciencia de mis actos y hay un montón de púberes con flequillos imposibles, gafas de pasta y camisetas extra pequeñas mirándome. Estoy en el centro de lo que parece una pista de baile pero la gente, en lugar de menearse, me mira ojiplática. En mis manos empuño amenazante una botella que previamente he destruido en varios pedazos contra dios sabe qué… ¿cómo cojones he llegado a este punto un martes por la noche?

No sé muy bien qué hacer para escapar ileso, pero poco a poco, a lo lejos, me vienen a la cabeza riffs de guitarra, punteos estridentes, grititos agudosm, imágenes de cuernos en lo alto. Creo saber lo que ha sucedido, creo recordar cual fue el resorte que me llevó hasta allí y entonces decido huir hacia adelante. «¡Y al próximo que me diga que los Purple son unos abuelos de mierda le rajo de lao a lao con lo que queda de esta botella de ron, malcriados del infierno! ¡Viva el puto hard rooock!», grito mientras me dirijo, con serios prolemas para enfocar, hacia lo que creo que es la salida del garito.

Efectivamente, es la salida, y allí me está esperando una pareja muy simpática de la Policía Municipal que, aparte de salvarme el culo y evitar mi linchamiento, pretende que pase unas horas en su compañía en una acogedora comisaría del distrito centro. Me comentan que han recibido varias quejas telefónicas por un tipo (al parecer ese soy yo) que iba por la calle asustando a las abuelas, robando caramelos a los niños, molestando a las parejas, cantándoles a voz en grito canciones en inglés «de algo así como heavy metal».

Siguen su relato aclarándome que estaba en la pista de baile del Ocho y Medio, lugar de reunión de lo más tontamente popmoderno (que no postmoderno, ya quisieran) retando a todo Cristo a batallas de air guitar mientras yo ejecutaba los acordes sólo con las cuerdas vocales. Como nadie quería jugar conmigo, se ve que me fui poniendo progresivamente violento, hasta que terminé por romper varias botellas. Según me aseguran, puedo dar gracias al mismísimo Richie Blackmore por no haber provocado herido alguno, pues entonces no tendrían más remedio que ser algo menos simpáticos conmigo.

«Estuviste en el concierto de Deep Purple, ¿cierto? A mi me gustan un huevo. Les escuchaba casi a diario cuando iba al instituto, en Marqués de Vadillo», me dice uno de ellos. «Pero a este otro gili no le molan, es más de flamenquito», dice refiriéndose a su compañero, al que luego le da una colleja cariñosa. Yo apenas puedo hablar, aunque ya voy dando cuenta de la que he montado e incluso empiezo a sentirme algo preocupado por las consecuencias. Tras unos segundos eternos en los que intento confeccionar la frase en mi cabeza antes de lanzarla, por fin me la juego: «El concierto ha sido la polla, madre mía, la gente entregada. Yo hoy iba de tranqui, pero se me ha ido de las manos por culpa de Steve Morse, el tipo de la guitarra. He hecho fotos, mirad», y les ofrezco la cámara tórpemente desde el asiento de atrás, el de los malos.

Me da la impresión de que los maderos no tienen muchas ganas de trabajar, pues se paran tranquilamente en un semáforo a ver mis fotos. El poli bueno me mira: «yo tenía el pelo largo tío, por aquí, por la espalda», me dice mientras se señala con la mano un poco por encima del culo. Me vengo arriba milagrosamente y comienza mi defensa desesperada. «Salí de trabajar tarde, pero llegué justo a tiempo. Me pedí una cervecita y casi al instante se apagaron las luces. Creo que empezaron con Highway Star, y a partir de ahí, ya un no parar. Simplemente me dejé llevar», argumenté.

Como si algo hubiera hecho click en mi cerebro, recuerdo canciones, sensaciones, imágenes nítidas. «De repente me vi rodeado de mi gente. Camisetas de Deep Purple, claro, y también de Led Zeppelin, Metallica, AC/DC, Edguy, Ramones… ¡me siento taaaan en casa en ambientes de este tipo! Luego que si Strange Kind of Woman, Perfect Strangers, Space Truckin’, Smoke on the Water como final de la primera parte… ¡hacía tiempo que no veía pedir un bis con tanta furia! ¡Vaya afición, me río yo del Frente Atlético! Pero es que Smoke on the Water asalvaja a cualquiera. Luego Hush y el broche brutal con Black Night y todo el mundo coreando al ritmo de la guitarra de Morse. Simplemente perdí el control. Y eso que fueron noventa minutos clavados nada más».

«Y otra cosa os digo. Había leído en internet que Gillan estaba en baja forma, pero hombre, es que el que tuvo retuvo. Es cierto que empezó bien y luego fue decayendo, pero ahí sigue el tío, colorado como un tomate, esforzándose para a veces no llegar, con unas tablas acojonantes y levantando la patita cuando tiene que alcanzar agudos imposibles. El resto, lo mismo. Ian Paice es una mala bestia, igual que Roger Glover con el bajo y Airey con los teclados. Lo de Morse es de otra liga, por momentos parecía que era un concierto de guitarrista en plan Satriani, Vai o Malmsteen, pues se hacía con todo el protagonismo durante largo rato. Pero luego llegaban las canciones y, ¡ay amigo, qué canciones!». Podría haberme tirado soltando mierda por la boca horas y horas, pero al ver los caretos de mis captores decidí parar.

Los polis me miran y se mean de risa. «¿Y mañana no trabajas?» me pregunta el poli malo. «Sí, claro, bueno, creo, porque hoy es martes, ¿no?», le respondo. «En fin, son las cinco de la mañana ya del miércoles, así que supongo que tienes un problema del tamaño de Wichita, por lo menos», me dice con sorna. «¿Sabes lo que te digo? Que te vamos a dejar que te pires a casa, pero si nos prometes que en un rato estarás currando como un campeón a pesar de los dolores», anuncia mi poli bueno, mi amigo ya para siempre. «¿Y si me llevais a casa me paso de guay?, les dejó caer… justo antes de que enciendan la sirena y cojan la carretera de Extremadura a 120 kilómetros por hora.

Mientras el aire que entra por las ventanillas me da de frente en la cara, pienso: «Si estos creen que me voy a dormir lo llevan claro. Ahora mismo me pongo el Machine Head con los cascos a todo volumen. ¡Eso sí que espabila y pone las filas para ir a currar de empalmada!» Mientras subía por las escaleras tocando imaginariamente el Pictures of Home (no la tocaron ellos, los muy cabritos), recordé también que había grabado un par de videos con mi cámara, que resultó que no estaban mal como recuerdo de una noche tan movidita como la ocasión merecía:

¡Toma Deep Purple! ¡Superb!



Otras crónicas:
El País
ABC

Comparte
Tagged

11 thoughts on “Deep Purple (2009) Palacio Vistalegre. Madrid

  1. Crónica simpática, sin duda alguna. Pero no te pongas violento en los conciertos porque luego la gente se queda solo con ese detalle, y asocia malos rollos con el Hard Rock. Ya contarás si llegaste a currar por la mañana y qué tal te fue. 🙂

  2. Master…. ya dije que estos tipos no iban a defraudar, en Barcelona estuvieron geniales y por lo que leo, en Madrid, idem de idem….. si, no esta Blackmore, no esta Lord, y sin ser aquellos Purple de los 70, siguen siendo grandes.

    Por cierto, veo que terminastes bien el concierto… ja, ja…… como para ir contigo de conciertos… ja, ja… bueno, seguro que con U2 salistes mas relajado…. ja, ja..

    Un saludo.

  3. Tío, lo que has dicho es la verdad más absoluta: "los que tuvieron retuvieron". La gente que ayer fue a ver a Deep Purple sabía qué nos íbamos a encontrar -una música increíble-. He visto algunas críticas en algunos periódicos y es triste ver el nivel de algunos críticos musicales -en una de ellas se llega a comparar el esfuerzo vocal de Gillan con los gallitos de Paulina Rubio o una de esas… triste-. Bueno, lo importante es que lo pasamos bien, punto:)

  4. Por 40€ más gastos una hora y media pelada con Gillan en el estado que está me pareció francamente una estafa. Por mucho que uno intente salvar el asunto hay que ser objetivo. Gillan debería pensar seriamente en dejarlo porque no da la talla en absoluto. En breve publicare mi crónica también con fotos y videos en mi blog.

    Salud

  5. El crítico de El País se pone en plan divo y los despelleja. Tal vez es la única forma que tiene de destacar en su trabajo. Yo disfruté como un enano y las personas con las que fui también. Nadie tiene el sonido de los Purple. Son grandes músicos que nos dejaron con ganas de mucho más, que es lo mejor que se puede decir en un concierto. Pero bueno, el muchacho de El País que vaya a ver a Madonna, Bustamante o algún otro, que seguro que disfruta más.

  6. Soy el fan número uno de Gillan, pero hay que reconocer que ni su voz ni su pobre vestimenta (parecía un pordiosero) eran dignas de un concierto de tal categoría. Podía aprender de la dignidad y profesionalidad sobre el escenario de sus compañeros de Marc II Glover y Paice. Yo creo que los pocos que fuimos disfrutamos y estuvimos incluso por encima de la banda y sobre todo de los promotores. Siempre ocurre lo mismo: locales con mala sonorización, precios escandalosos y desorganización absoluta (¿dónde se metieron los teloneros?, ¿cuál era la hora de comienzo del concierto según la entrada? Ya está bien. Javi

  7. Lo q me rei con tu cronica chaval,jajajajaja;1º:el concierto brutal,disfrute como un enano y me emocione un huevo nada mas empezar con highway star!!2ºbravo steve,me pude olvidar durante ujn concierto de 90 minutos de blackmore,se le vio entregado y conectando con el publico(lo teniamos delante a escasos 2 3 metros)
    3ºal q escribio la cronica del el pais q le den mucho por c… y si escribio eso pq se perdió el partido del madrid,q se joda,q cambie de trabajo.4ºla gente estuvo de coña,daba igual quien tuvieses al lado,detras o delante,levantar los cuernos,saltando,cantando….fue muy bueno,por lo menos la zona q me toco(salvo el gilipollas q buscando una pua se me puso delante,era pequeñin no me importó,y al poco se hizo con una pua pisando en la mano a mi chica),tio,enano,gilipollas,espero q pierdas la pua y en su defecto q t sientas encima de ella.

    CONCLUSION: conciertazo!!!

  8. Excelente cronica me ha gustao
    Estuve en el conci, y que te puedo decir, son los maestros de lo que hoy seguimos escuchando. Honor a quien honor merece y mas nada.
    Salu2
    Ferradri2000

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *