– Bunbury (2008) Palacio de los Deportes. Madrid

Crónicas

Lugar: Palacio de los Deportes. Madrid
Fecha: 23 octubre 2008
Asistencia:
9.000 personas

Artistas Invitados:

Precio:
32 euros

Músicos:
Enrique Ortiz de Landázuri (voz y guitarras), Álvaro Suite (guitarras), Roberto Castellanos (bajo), Jorge ‘Rebe’ Rebenaque (hammond, teclados y acordeón), Ramón Gacías (batería) y Jordi Mena (guitarras)

Setlist: El club de los imposibles, Señorita hermafrodita, Hay muy poca gente, Bujías para el dolor, Sólo si me perdonas, 200 huesos y un collar de calaveras, Sácame de aquí, Desmejorado, Porque las cosas cambian, Infinito, El extranjero, Contar contigo, Sí, El hombre delgado que no flaqueará jamás, El rescate, Lady Blue, Apuesta por el rock and roll, El viento a favor, No me llames cariño, Si no fuera por tí, Que tengas suertecita, Canto (el mismo dolor), Y al final…, Canción Cruel, El tiempo de las cerezas

[Puedes descargar este concierto en dos partes: Parte 1 / Parte 2]

Carpetazo al nómada cabaret. Bujías para el dolor lo confirma. Aunque bueno, no exactamente, ya que por momentos aquello sonaba a la No smoking orchestra de Emir Kusturica, si bien lo cierto es que la mayor parte de las dos horas y media de concierto fueron más en plan Bunbury y Los Trogloditas. Porque el espejismo de la no vuelta de Héroes del silencio rompió otra vez el corazón a miles de personas, pero al menos sirvió para que Enrique (léase ¡Enriqueeeeeeeeeee! con voz de lunática niña chillona) ahora irrumpa sobre los escenarios disparando rocanrol al aire.

Sentando cátedra y provocando histerias, porque el Palacio tembló cuando el hombre demasiado delgado tomó las tablas al asalto. No hubo lleno y se hizo uso de los telones negros para tapar las gradas altas, pero los cerca de 10.000 que allí se congregaron iban jugando al uno fijo, como casi el cien por cien de los que asisten a los recitales de Bunbury. Ir para nada es tontería, en este caso no vale lo de si hay que ir se va. Para eso mejor que se queden en su puta casa. Esto es un ejercicio de rendición incondicional sobradamente justificado.

Una vez pagado el peaje, y con todos los semáforos en verde a la vez, las canciones entraron en el pecho de los asistentes como ese cigarro que llega a pulmón abierto después de un rato de footing por el parque. Hasta el fondo, limpiamente, para luego salir por ásperas gargantas deseosas de corear y remojadas por cerveza no precisamente barata. Las canciones de Flamingos (2002) sonaron a clásicos (algunos más reinventados que otros), y las pocas anteriores a ese álbum suenan ya muy lejanas. Apuesta por el rocanrol, el momento más cercano a Héroes, fue una suerte de exaltación colectiva y declaración de intenciones a toro pasado. Al final sí, rocanrol. Siempre gracias, aunque el setlist sea algo dudoso, aunque no cayera algún guiño más a la mastodóntica banda y aunque se quedaran olvidados en algún lugar los restos del naufragio. Qué atrevimiento.

Contento, parlanchín, cómodo y casi se podría uno atrever a asegurar que feliz, agradecido por cada aplauso, señalando a una bandera mejicana que sobresalía entre las primeras filas. La furia inicial se tornó en la parte final en una emotiva sucesión de desnudos sin photoshop. Hay mucha pose (como cabe exigir siempre a quien se sube a un escenario), pero también hay sangre en la música y unas letras convenientemente arrejuntadas. De esas que supuran, mojan los ojos o duelen en la garganta.

Ojipláticos, boquiabiertos, el aterrizaje fue suave. ¡Se trata de música, escuchen! ¡Si acaso pueden tararear o bramar llegado el momento, pero escuchen! El viento a favor, No me llames cariño, Canto, Y al final, El tiempo de las cerezas. Emoción contenida en el entrañable tramo acústico final no previsto inicialmente en el guión, según aseguró el propio cantante. Sólo le faltó arropar uno a uno a sus fieles. Entre el público se escuchaba a la gente hablar sin dejar de prestar atención, hasta que el amigo Kastrolas, embobado, dictó sentencia: «¡Qué grande es!». Bienvenido de vuelta, Enriqueeeeee (lease de nuevo con voz de lunática chica enloquecida).

Pilar Giménez, de Bunburydad, nos cede amablemente estas fotos:

Crónicas de gente bien:

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– Bunbury (2002) Plaza de toros. Móstoles (Madrid)
– Bunbury (2003) Palacio de Exposiciones y Congresos. Madrid
Bunbury (2005) Paraninfo Universidad Complutense. Madrid
Héroes del Silencio (2007) Estadio Olímpico. Sevilla

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13 thoughts on “– Bunbury (2008) Palacio de los Deportes. Madrid

  1. Nobleza obliga, creo que tu percepción del concierto está más cerca de la realidad que la mía. No sé, yo no acabé de despegar por alguna razón. Creo que no elegí bien mi ubicación, además.

    Oye, ¿de dónde demonios has sacado esa entrada tan bonita que hay arriba (la que no es de El Corte Inglés, evidentemente). Como coleccionista de entradas, me escuece que existan y no haberlas conseguido…

    Jota78

    http://www.silatocasotravez.wordpress.com

  2. Ah, una cosa más. Creo que el orden del repertorio no es correcto, me parece que los bises están desordenados.

    Dicho esto, me quito el sombrero de que siempre los pongas. ¿Vas con libretilla para apuntar?

    Jota78

  3. Gracias por tu comentario en mi blog, Galko.

    Tu post de Bunbury me mola mucho también, porque además en esta ocasión no pude ir a verle, y también le sigo.

    A la vista está que eres un veterano bloguero. Y no hay muchos blogs como el tuyo, que cuiden la forma de escribir y la documentación.

  4. Jota, la entrada esa tan de puta madre la podías conseguir si la comprabas en Sun Records, en lugar de en El Corte Inglés. Allí todavía funciona el viejo sistema de vender entradas por tacos, como en tiempos de Madrid Rock. Cuando quieras ir a un concierto no tienes más que informarte de si venden allí (está en la plaza de Santo Domingo) y acercarte. Merece la pena, ¿verdad? Saludos a ti y a todos.

  5. Bueno, bueno…
    Que decir del regreso de nuestro amado Bunbury, pues yo digo que el concierto del Jueves, ha sido uno de los mejores, sino el mejor, que recuerdo de este hombre.

    Sin demasiado agobio y con muchisimo Rock n’ roll, realmente disfruté como un enano en las mas de 2,5 horas que duró el concierto, es mas, se me hicieron cortisimas…queria mas de esa droga, joder!!!

    Y que decir del comienzo, mi favorita, El «puto» club de los imposibles…que temazo, de esos que dices, me llena, joder, me llena.

    En resumen, disfrutar mucho de Rock, con buena compañia y buena gentuza como el autor de esta gran cronica.

    Saludos hermanos.

    KaStRoLaS

  6. Hola Galko,
    ¡Hombre, capaz que nos cruzamos en el concierto el jueves! Excelente crónica, y geniales los videos y las fotos. No me lleve la cámara, pero bueno, ahora publicaré mi humilde percepción de esa noche tan mágica.
    Un abrazo, seguimos leyendonos.
    El Mar.

  7. Soy Ana. A mi me gustaban Heroes, pero nunca he sido fan de Bunbury, eso hasta el concierto del sábado. Creo que con eso esta dicho todo.

    Gracias Galko.

  8. Poco mas que añadir a lo comentado.Para mi fue un concierto cojonudo.
    Me gustó el tema de los fragmentos de las pelis de serie b, el momento cabaretero, el blues arrebatador con Me calaste hondo y la desgarradora No me llames cariño. Ademas, descubrí canciones de Hellville que a priori no me habian llenado como temas que sonaban muy bien en directo, creo que cobraban todo el sentido de cuando fueron escritas.

    En fin, veremos como aterriza en Salamanca.

    bs

  9. Excelente crónica Galko, como todas las que veo que publicas.
    Respecto a Bunbury, yo reconozco que soy uno más de los que pasó de ser fanático devoto de Héroes a olvidar su carrera en solitario cuando cambió el rock & roll por la electrónica y la música "de pandereta". Pero creo que con el disco nuevo y el gran concierto del jueves he cogido el momento perfecto para reconciliarme con este tio. Perfecto el sonido, la puesta en escena y la duración (joder, más de 2 horas empieza a ser un lujo en cualquier concierto).
    Me calaste hondo Bunbury, gran concierto.

    jcdelgado00

  10. Impresionante el concierto…tanto que sin palabras me ha dejado…Ahora no puedo escuchar nada más que a Bunbury, ya es el nº1 de mi lista de LastFm.

    Gracias por la recomendación a tu blog.

    Nos vemos en los conciertos.

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